POSTURAS SEXUALES QUE DEBES PROBAR UNA VEZ EN LA VIDA

Cuando hablamos de posturas sexuales da igual si eres un amante de la experimentación y el Kamasutra o si te va más lo convencional, hay ciertas posiciones que toda persona debería experimentar al menos una vez en la vida para maximizar el disfrute y evitar la rutina. Está claro que hay tantas posibles opciones como parejas, pero no todas son iguales, algunas ostentan el título de imperdibles.

Desde algunos clásicos infalibles hasta las propuestas más desafiantes, bienvenido a nuestra lista oficial de posturas sexuales que debes probar, aunque sea una vez en la vida.



 


1. El perrito 

El perrito, la posición en cuatro, o a cuatro patas. Son muchos los nombres que recibe este clásico del sexo, y es que se trata de una de las posiciones sexuales más populares y las razones son varias: disfrute, control y una penetración profunda son los principales ingredientes de un “perrito” en toda regla.

Para llevarla a cabo una de las personas debe ponerse “a cuatro patas” con las piernas abiertas, mientras la otra persona debe colocarse de rodillas detrás para penetrar vaginal o analmente, ya sea con el pene o con un juguete sexual. Así, quien está detrás disfruta del control sobre la penetración, mientras que quien está delante se beneficia de la intensidad de la postura y de la estimulación que esta puede producir.

Otra ventaja es que la postura en cuatro permite estimular otras zonas genitales de quien está recibiendo la penetración, haciendo que el encuentro sea mucho más excitante, ya sea con los dedos, la mano o con un juguete sexual.

 

2. La silla 

Entre las posturas sexuales que debes probar al menos una vez, la silla destaca por su sensualidad, ofreciendo a la persona que está arriba el control total de la situación. Para llevarla a cabo necesitaréis una silla o sillón espacioso. 

Una persona se sienta en la silla, mientras que la otra se sienta encima con una pierna a cada lado y toma el control. En las parejas heterosexuales, esta posición es perfecta para aquellas chicas que quieren probar ser más dominantes durante el sexo, ya que tienen pleno control del ángulo, la profundidad y la velocidad de cada movimiento. Por su parte, el hombre también está en la posición perfecta para explorar el cuerpo de su pareja. Con las dos manos libres, puede estimular los pechos de su chica o cogerla de las nalgas para empujar aún más profundamente, permitiendo un encuentro más salvaje y placentero.

Pero no es una postura exclusiva para chico/chica, ya que también puede resultar ideal en el sexo entre chicos, pues si la persona que está arriba se inclina ligeramente hacia adelante se permite una buena estimulación anal, ya sea con el dedo o con algún juguete sexual. Mientras que entre dos chicas esta posición favorece el roce genital y la estimulación de los pechos…¡vamos que es ideal para todos!  

3. El molde

¿Buscas una postura sexual que favorezca la intimidad? Entonces el molde es la opción ideal para todos los gustos y preferencias sexuales. Para hacerla las dos personas de la pareja tienen que estar tendidas de costado, del mismo lado y con las piernas juntas, encajando los dos cuerpos a la perfección, como un molde. Después, durante la penetración, ya sea con el pene o con un juguete sexual, se pueden estimular las zonas erógenas manualmente haciendo que la experiencia sea altamente excitante para ambos.

4. El dragón

Es posible que si te decimos “El dragón” no te suene de nada…pero ¿y si te decimos “por detrás”? Seguro que enseguida identificas esta postura sexual que es buena tanto para la penetración vaginal como anal.

Para hacerla, una de las personas se acuesta boca abajo con una almohada o cojín en la pelvis para favorecer la comodidad y facilitar la penetración, mientras la pareja se acuesta encima en la misma posición, penetrando por detrás la vagina o el ano. Se trata de una postura lenta, rítmica e ideal para el sexo anal, especialmente en el caso de los principiantes, pero también para un sexo vaginal suave e inolvidable.  Y si quieres hacerla más interesante, añade un lubricante con efecto.

5. El puente

Esta es una variante del misionero que elevará la temperatura al máximo. La postura del puente requiere un poco más de flexibilidad por parte de la persona que está abajo, ¡pero merece la pena! Para esta posición, la persona que penetra debe arrodillarse mientras que la otra persona se queda boca arriba con los pies apoyados y las caderas levantadas hacia el techo en posición de puente, esto permite una penetración perfecta y placentera.

El nuevo ángulo de penetración puede generar estímulos muy intensos, además tiene el beneficio añadido de tonificar los muslos y glúteos al mismo tiempo. ¡Todos ganan!

6. Cabalgando

¿Hay algo más excitante que cabalgar a tu pareja y sentir que controlas todo el placer del sexo? Pues si esta imagen te excita, entonces esta es una de las posturas sexuales que debes probar al menos una vez en la vida, una alternativa en la que la persona que está arriba es la dominante y toma todo el control.

Una de las personas de la pareja se acuesta mientras la otra se sienta encima hasta encajar a la perfección. Quien está arriba puede aligerar parte del peso, ya sea inclinándose hacia atrás o hacia adelante y usando sus brazos como apoyo. En cada ángulo obtendrá un placer diferente, por lo que conviene probar los dos. Por si fuera poco, teniendo el control es posible retrasar el clímax realizando movimientos más rápidos o más lentos. ¡Ser jinet@ nunca fue tan delicioso!

7. Espeleólog@

El sexo no es solo penetración, por eso en este listado no puede faltar una postura para el sexo oral que ha llevado a muchos al orgasmo: el/la espeleólog@ y es que para hacerla tendrás que bajar y explorar a tu pareja con la lengua como si de una caverna se tratara…¡cuidado que se avecinan potentes orgasmos!

Hacerla no puede ser más sencillo: una de las personas de la pareja se coloca de pie y de espaldas, preferiblemente apoyada de una pared para mayor comodidad, mientras la otra se arrodilla y accede a su zona genital con la boca, estimulando la vagina o el ano según la preferencia. Aquí solo hay una cosa cierta: el sexo oral cobrará una nueva dimensión después de probar esta posición sexual creativa e imperdible.

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